A medida que vamos envejeciendo, aparecen diferentes patologías. Son problemas relacionados con la tercera edad. Algo muy lógico, ¡los años no pasan en balde! Por eso, es necesario saber cuáles son estas patologías.
No en vano, las personas a cargo de cuidar a los ancianos, ya sean cuidadores especialistas o algún familiar, deben conocer estas enfermedades para mejorar el trato y cuidado de los adultos mayores afectados.
En este sentido, una buena formación puede ser fundamental. Recuerda que, en Mecohisa contamos con un curso sobre el envejecimiento y patología de la vez, ¡échale un ojo!
Enfermedades Físicas de los Ancianos
Cuando llegamos a la tercera edad, los huesos se vuelven más frágiles. De la misma forma, las defensas tienden a disminuir y ciertos órganos empiezan a funcionar con una menor eficacia. Todo ello influye en una serie de patologías y enfermedades físicas, como las que vamos a ver a continuación.
Artritis y Artrosis
La artritis perjudica a las articulaciones. Se define como una inflamación que daña o deteriora a la membrana sinovial. Así, el líquido sinovial encargado de lubricar se dispersa por las articulaciones cuando debería ser reabsorbido. Esto tiene como consecuencia una erosión del cartílago y los huesos, siendo una de las enfermedades y patologías que más afectan a las personas de la tercera edad.
La artrosis se define como un tipo de artritis que surge por la degeneración del cartílago articular, hasta su completo desgaste. Es una patología que produce bastante dolor cuando existe el movimiento. Los ancianos que sufren artritis o artrosis pueden establecer una vida normal gracias a tratamientos de infiltraciones, así como antiinflamatorios y rehabilitación.
Osteoporosis
La osteoporosis es una de las enfermedades y patologías más comunes en las personas mayores. Esta enfermedad hace que los huesos se debiliten y se vuelvan quebradizos, por lo que cualquier caída o una leve tensión podrían causar una lesión a los afectados.
Es una enfermedad que se puede definir como sistemática esquelética, a causa de una disminución de la masa ósea, aumentando el riesgo de sufrir alguna fractura. Esta patología se caracteriza por ser asintomática, por lo que una persona puede padecerla sin saberlo, hasta que se manifiesta con alguna fractura.
Los aspectos para prevenir la osteoporosis se engloban en una dieta balanceada y ejercicios aeróbicos, con el fin de fortalecer los huesos y prevenir la pérdida de la masa ósea.
Diabetes
Cuando vamos envejeciendo, nuestro cuerpo va atravesando una serie de cambios. Es por ello que el sueño se reduce. Las barreras de defensas se vuelven más sensibles, teniendo como consecuencia que ciertas enfermedades afecten de forma más fácil a una avanzada edad. En consecuencia, el riesgo de padecer diabetes es mucho más elevado.
La diabetes es una enfermedad grave que puede afectar tanto a los de la tercera edad, como a los niños. Se desarrolla cuando ek azúcar en la sangre es muy elevado.
Nuestro organismo normalmente realiza el proceso de transformar los alimentos que consumimos con azúcar en glucosa, que nos proporciona energía. Para que nuestro cuerpo use la glucosa, como energía, necesita insulina.
Cuando un individuo padece diabetes, su organismo no produce insulina, causando un exceso de glucosa en la sangre, que trae como consecuencia problemas de salud. Los tipos de diabetes existente son la diabetes tipo 1 y la diabetes tipo 2. Ambas pueden afectar a distintas partes del organismo, por lo que es importante controlar esta enfermedad.
Con el tiempo, puede causar una gravedad en la salud como derrames cerebrales, problemas oculares, enfermedades cardíacas y daños a los nervios que pueden terminar en amputaciones.
Gripe y Neumonía
La gripe se podría definir como una enfermedad respiratoria que se trasmite, con síntomas de dolor de cabeza, secreción nasal, dolor de garganta, estornudo, cansancio, fiebre. Mientras que la neumonía es una infección en los pulmones con síntomas entre fiebre alta, fatiga extrema, tos, respiración corta, dolor de pecho, sudor. La gripe y la neumonía poseen síntomas iguales tales como escalofríos, tos, dolor de cuerpo, vómito y pérdida del apetito.
La neumonía es de las enfermedades y patologías más presentes en las personas de la tercera edad, esto se debe a diferentes factores de riesgo y al diagnóstico tardío. La neumonía puede ser a causa de la presencia de distintos microorganismos como virus, hongos o bacterias. Cuando una persona tiene gripe es bastante común que si no se realiza el tratamiento adecuado se convierta en neumonía.
Existen dos tipos de neumonías, la adquirida en la comunidad y la neumonía intrahospitalaria o nosocomial.
La adquirida en la comunidad se caracteriza por contagiarse fuera de los hospitales y centros de salud. Gracias a que es diagnosticada a tiempo y controlada por los tratamientos adecuados, su recuperación es se desarrolla con mayor facilidad.
La intrahospitalaria se caracteriza por afectar a los pacientes que se encuentran hospitalizados por distintas enfermedades o padecimientos, resulta bastante difícil de tratar porque desarrolla una resistencia mayor a los fármacos.
Patologías Cardiovasculares
Las enfermedades cardiovasculares son las que afectan al corazón y a los vasos sanguíneos. Podemos encontrar un gran número de patologías relacionadas con el sistema cardiovascular.
Una de las más comunes es la cardiopatía coronaria, donde los vasos sanguíneos del corazón no reciben la cantidad necesaria de sangre para poder hacer su trabajo. Por ello, con el paso de la edad es más probable sufrir un infarto de miocardio o una angina de pecho, relacionadas con esta patología.
Asimismo, las personas de mayor edad tienden a sufrir enfermedades como la hipertensión arterial, donde puede haber problemas con el paso de la sangre, al hacerse las arterias más gruesas. Una adecuada monitorización de aquellos pacientes con hitertensión es necesaria, con un control diario de la tensión.
Patologías Cerebrovasculares
El peor funcionamiento de los vasos sanguíneos y el cerebro también está detrás de muchas enfermedades en la vejez. El sistema cerebrovascular se deteriora y las venas y arterias se ven afectadas, haciendo que la sangre no circule correctamente.
Este tipo de patologías puede implicar efectos de menor o mayor gravedad, como la menor coordinación de movimiento, un empeoramiento de la vista y, en los casos más graves, el aumento de probabilidades de que se produzca un ictus.
Enfermedades Psicológicas y Mentales del Anciano
Las personas de la tercera edad comúnmente atraviesan distintas enfermedades que afectan su salud mental. Las principales enfermedades en los ancianos con respecto al ámbito psicológico o mental son las siguientes.
Alzheimer
El Alzheimer es una de las enfermedades más complejas de las que se pueden dar en la vejez. Se podría definir como una alteración neurodegenerativa que muchas veces suele aparecer a partir de los 65 años. Se produce por el acumulo patológico de unas proteínas en el cerebro.
Cuando se padece esta enfermedad, las personas atraviesan cambios microscópicos en el tejido de algunas zonas del cerebro, haciendo que disminuyan neurotransmisores como la acetilcolina, la cual permite que las células nerviosas se comuniquen entre sí y pueda existir la memoria, el aprendizaje y el pensamiento.
El Alzheimer se caracteriza por la pérdida de memoria. A medida que avanza el tiempo va empeorando. Algunos de los síntomas de esta enfermedad consisten en repetir preguntas y afirmaciones, perderse en lugares que antes conocían perfectamente u olvidarse de nombres de familiares, entre otros.
Parkinson
La enfermedad de Parkinson es neurodegenerativa, donde las neuronas más afectadas son las dopaminérgicas, encargadas de la coordinación del movimiento. Se trata de una enfermedad que avanza de manera lenta y crónica.
El cuadro clínico de una persona con Parkinson es de lo más variopinta, incluyendo una serie de síntomas, entre los que destacan el temblor cuando se está en reposo, la pérdida de equilibrio o movimientos lentos y con rigidez muscular. Otros síntomas relacionados con el Parkinson son el estreñimiento o el exceso de sudoración.
Depresión
La depresión se puede definir como un trastorno del estado de ánimo con sentimientos prolongados que afectan a la vida cotidiana como la tristeza, ira, frustración, que se prolonga durante semanas o más tiempo.
La depresión es una de las enfermedades y patologías más presentes en ancianos. Esto puede ser a causa de muchas situaciones, como la ausencia de familiares y la consiguiente soledad, la falta de independencia o la incapacidad para valerse por sí misma.
Muchas veces se puede notar por actitudes de apatía, indiferencia, aburrimiento, angustia, lentitud del pensamiento, inseguridad, alteraciones en el sueño y el apetito.
Por otro lado, la depresión también podría ser a causa de enfermedades físicas como el mal de Parkinson, Cáncer, Alzheimer, enfermedades cardiovasculares, trastorno de tiroides y accidentes cerebrovasculares.
Como puedes ver, existe una gran cantidad de enfermedades y patologías vinculadas con la vejez. Por eso, es una prioridad asegurar la mejor de las condiciones para las personas mayores, ofreciendo los mejores cuidados posibles.